Esperanza Aguirre, «española universal»

Muchos se preguntan por qué enarbolamos banderas de España. ¿Por qué esa manía que tenemos los peperos? Entre otras razones -al menos para mí- y a parte de que significa rendir tributo al pasado y a una patria que ha construido a lo largo de los siglos con mucho esfuerzo un país desarrollado y competitivo con un aceptable nivel de vida de sus ciudadanos, significa para mí, decía, la Libertad, la Constitución, el Estado de derecho, el esfuerzo de hacer valer la Ley y cosechar el progreso donde esa bandera esté ondeando.

Pues la Cámara de Comercio española en Miami ha otorgado el premio de Español universal este curso a Esperanza Aguirre y ella con su discurso en el acto de entrega lució «mí» bandera de España, deseando Libertad para el pueblo cubano, que como contó, no puede ser que «Cuba siga siendo uno de los pocos países del mundo con las cárceles llenas de presos políticos» y deseó que los países latinoamericanos ahora embarcados en regímenes más o menos populistas «abandonen el fanatismo y marchen por la senda de la libertad».

Olvídense amigos progres de los obispos, de un señor bajito que murió cuando las actrices  en los setenta enseñaban tetas en los teatros, olvidaos de revoluciones y demás, de llamarme facha porque sí, y de mil insultos más para cubrir vuestro desasosiego al no comprender por qué amo el rojo y gualda de mi bandera.

Amigos, la actitud de nuestra Presidenta, enarbolando la bandera de la Libertad cuando la cubren de premios por ser española, eso, es para mí nación, es España. Y me enorgullece.